Los modos de conocer de las Ciencias Naturales están anclados en experiencias escolares vinculadas al laboratorio, a las salidas de campo, a la exploración e indagación en equipos y, especialmente, a la presencialidad. Este 2020 nos puso de cara al desafío de pensar y diseñar estrategias que acerquen a las y los estudiantes al mundo natural, que les permitan elaborar hipótesis, contrastar conjeturas, correlacionar datos, observar, explicar y compartir con otros sin hacer uso de esos dispositivos que conforman la gramática escolar habitual.
El contexto, lejos de limitarnos, nos permitió el uso de recursos que tomaron otra trascendencia y la virtualidad se constituyó como un espacio de trabajo colaborativo y dinámico, en el que las clases on line se cruzaron con otras herramientas potentes de uso libre, impregnadas de imaginación y de un diálogo compartido. Así se fueron instalando nuevos modos de ser y estar y una nueva manera de vincularnos y crear lazos de pertenencia.
No fue fácil esta acomodación; tanto para estudiantes como para docentes implicó un verdadero aprendizaje que fuimos realizando “de la mano”, haciendo un verdadero trabajo de equipo para lograr dominar nuevos campos y generar ese lazo de pertenencia del que hablábamos antes y seguir sintiendo que el espíritu de la comunidad Glaux trasciende a la presencialidad.
Por supuesto, aparecieron dificultades; pero, como siempre decimos, preferimos rescatar todo lo ganado en este tiempo: las buenas experiencias, los nuevos aprendizajes, las nuevas dinámicas de vinculación, el saludo afectuoso, los momentos de habla y de escucha y, lo más enriquecedor, el ser partícipes de un intercambio basado en ideas constructivas.
Todos y todas aprendimos a trabajar de una manera diferente, resignificando nuevos aspectos, no presentes en la presencialidad.
Queremos compartir algunos de los logros y aprendizajes que marcaron la vida de cada estudiante en este 2020.
Uso de simulaciones computacionales como alternativa a la práctica experimental en Física de 4° año
Por Gabriela JiménezLas simulaciones computacionales son un recurso que colabora en la construcción de conocimiento científico y el desarrollo de algunos de los modos de conocer en las ciencias naturales. Permiten recrear fenómenos, lo que favorece el análisis, la anticipación y la puesta a prueba de hipótesis, cuando, sea por que no se cuenta con un laboratorio o porque existen dificultades para llevar adelante algunos tipos de experimentos, no podemos observarlos en forma directa.
La cuestión energética (en especial, su uso eficiente) es un tema de agenda a nivel global y regional y del que la educación debe ocuparse para promover conciencia y acción ciudadana responsable. Con este sentido es que encaramos la tarea en Física de 4° año, poniendo el foco en los modos de producción de energía y arribando finalmente al concepto de Matriz Energética. La larga tradición nuclear de la Argentina nos hizo detener un poco más y poner la lupa en la energía nuclear, sus aportes a la matriz energética y el largo historial de I+D que nuestro país tiene en relación a este recurso.
Una de las propuestas de este año fue, entonces, la de armar un tutorial para el uso eficiente de un simulador de una central nuclear. El grupo de 4° año asumió el desafío de abastecer de energía de manera continua y en función de las demandas a una ciudad cuidando los costos y la integridad de la central. Para ello, se trabajó con un simulador de uso libre y el diseño de un tutorial.